Chulengos de tambor: el modelo clásico y criollo
El chulengo de tambor es el más tradicional de todos. Nació del ingenio popular, usando tambores de 200 litros cortados a lo largo y adaptados para cocinar. Con tapa, parrilla y ruedas, se convirtió en el símbolo del asador práctico y rendidor.
✅ Ventajas del chulengo de tambor
- Económico: si lo hacés vos, es barato y personalizable.
- Buen rendimiento térmico: conserva el calor durante horas.
- Fácil de transportar: muchos vienen con ruedas y manijas.
- Estilo rústico: ideal para quinchos o patios criollos.
❌ Desventajas a tener en cuenta
- Oxidación: si no lo curás bien o lo dejás a la intemperie.
- Algunos tambores: pueden tener residuos o pinturas internas que hay que eliminar bien antes de usar.
📌 ¿Para quién es ideal?
Para el asador que quiere hacerlo todo: desde construirlo hasta cocinar. También es una gran opción si querés un equipo versátil, rendidor y con onda criolla.
🔥 Curalo bien
- Quemá varias horas antes del primer uso.
- No uses productos químicos, solo fuego directo.
- Si podés, agregale ladrillos refractarios para conservar el calor.
✅ Conclusión
Un chulengo de tambor es mucho más que una parrilla: es parte de la cultura asadora. Si te va el estilo criollo, este modelo nunca falla.